...y de repente descubrí que amanecía, y me encontraba en un balcón ajeno, sentada frente al mar. Era un escenario estático, solo la brisa se percibía por alguno de mis poros. No se movía una hoja...
Desde allí se podían ver algunas estructuras, alumbrados y como telón final, el mar.. ese mar calmo de madrugada.. solo podía oírlo, contemplarlo.
Voy a intentar describir. Sitúen su mente en un auditorio, visualicen el escenario, de piso de parquet viejo, donde hay un par de edificios coloridos y de aspecto antiguo, pero hechos de cartón (como en un acto escolar), todo completamente inmóvil, y de fondo, en una pantalla gigante, iluminada a través de un proyector con la imagen de un mar azul oscuro, con olas pequeñas y su sonido abrumador, solo eso tiene movimiento, solo el mar. Sí, así lo viví, lo sentí, mis sentidos no podían percibir nada más allá de esa escena.
//paz.
eugenia.
16 junio 2014 - 10.01 pm / Montañita-Ecuador
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